Loader
Julieta Mor - Foto de la semana | Revista Colibri
9707
post-template-default,single,single-post,postid-9707,single-format-standard,bridge-core-1.0.5,ajax_fade,page_not_loaded,,qode-title-hidden,qode_grid_1300,qode-theme-ver-18.1,qode-theme-bridge,disabled_footer_top,disabled_footer_bottom,qode_header_in_grid,wpb-js-composer js-comp-ver-6.0.2,vc_responsive

Julieta Mor – Foto de la semana

Por Alma González

Esta semana, compartimos uno de los proyectos de la fotógrafa Julieta Mor, donde aborda la falta de contacto y cariño entre varones: 

“El proyecto surgió por un sentimiento que tengo siempre: las ganas de estar en contacto con otro ser humano. En contacto real digamos, piel con piel, pero no de una forma genital, sino por una sexualidad más amplia, por el placer del tacto en sí mismo. Siempre tuve esa necesidad, de abrazar con soltura, de besar, de hacer mimitos. En ese sentir empecé a notar que en la mayoría de los vínculos en los que había amor, no necesariamente había contacto”, cuenta Julieta.  

“En este sentipensar comencé a notar que ciertas mujeres tenían más capacidad de dar y de recibir cariño, pero me costaba mucho encontrar varones que entre sí fueran cariñosos. Y el mayor contacto se daba a través de la violencia: en la adolescencia a través de golpearse y ya en la adultez inclusive los abrazos son cortos, con una palmada firme en la espalda. Nunca blandos, nunca suaves, nunca con el atrevimiento de sostener un contacto por demasiado tiempo. Así que se me ocurrió plantear el debate entre los varones más cercanos para mí: mi compañero, mi hermano, mis amigos. Quise, al menos, sembrar esa semilla de duda. Y acompañando este debate se me ocurrió hacerlo más impactante, no tan mental, llevarlo al plano de lo concreto. Así fue que comencé a retratar varones que estuvieran en contacto físico, para que el mensaje cobre otro peso”.

Por el momento tuvo una experiencia fotográfica con dos hermanos que ya conocía, donde la charla fue más extensiva que el registro en sí:

“Al principio hablamos de fotografía en general. Después comencé a preguntarles sobre el papel del cariño físico al interior de su familia. Y, sin sorpresas para mi, ellos me dijeron que el contacto estaba más legitimado en las mujeres, y que inclusive ellos se hallaban más en un abrazo con su madre que con su padre”.

“Yo no creo que haya una mayor predisposición biológica en la mujer para el cariño, sino que es una construcción social. Y una construcción muy limitante para el varón, que yo creo que tiene que poder autogestionarse sus ganas de un mimito sin estar atado a tener una relación sexoafectiva con une otre. Y de una gran carga para la mujer, que no tiene por qué ser LA dadora de contención y cuidado”, afirma Julieta.

Las imágenes que compone Julieta expresan su universo, donde la autenticidad y la dulzura son las máximas que prevalecen, y es también el caso de este proyecto ya que afirma que su finalidad “es expandir una necesidad básica del ser humano, que muchas veces queda olvidada, que no se le da tanta importancia. Me cuesta mucho habitar un mundo con tanta violencia, con tanta desigualdad, con tanta enfermedad, con tanta sed de poder. La desigualdad social es lo que más me duele. Y la falta de cariño es la segunda cosa que más me lastima. Así que a través de las fotos y de mi cotidiano voy creando micromundos de amor, voy plasmando lo que yo nos deseo a todes.”

Si querés seguirla en redes, encontrala en Instagram como @_julietamorsacafotos

No Comments

Post A Comment