Loader
No maten el arroyo: El Pescado contra la especulación inmobiliaria | Revista Colibri
14548
post-template-default,single,single-post,postid-14548,single-format-standard,bridge-core-1.0.5,ajax_fade,page_not_loaded,,qode-title-hidden,qode_grid_1300,qode-theme-ver-18.1,qode-theme-bridge,disabled_footer_top,disabled_footer_bottom,qode_header_in_grid,wpb-js-composer js-comp-ver-6.0.2,vc_responsive

No maten el arroyo: El Pescado contra la especulación inmobiliaria

  1. Por Charo Zeballos

Un sábado como cualquier otro a Luo se le ocurre dar una vuelta con amigues por el barrio. Amante de la naturaleza, lugareño conocedor, propone mostrarles el humedal que recorre desde la infancia. Es el otoño más caluroso de la historia en La Plata, también es el más seco en décadas, según informó el Servicio Meteorológico Nacional. Al llegar a la zona donde debería circular el vasto arroyo El Pescado, solo tierra sedienta y agrietada se extiende hacia el horizonte. Por donde pasaba agua solo existe un surco

“El arroyo era mi momento, ir a Correa, agarrar la bici y recorrer la vía abandonada del tren hasta llegar al puente. Lo conozco desde muy chico, corrí, pesqué con mi viejo, ví muchísimos animales de los que ahora quedan cada vez menos.  Verlo así es como si me lo hubieran arrebatado”, cuenta Luo a Revista Colibrí

La imagen de El Pescado sin agua por las inusuales sequías en la Pampa Húmeda impacta, pero no es el único peligro que enfrenta este reservorio de biodiversidad:  a pesar de que todo el humedal es considerado paisaje protegido, que alberga flora y fauna local, la especulación de las empresas inmobiliarias por hacerse de esas tierras -en zonas inundables- para vender como lotes, corre cada vez más la frontera natural.

Tiene una extensión de aproximadamente 36 kilómetros y atraviesa Arana, Ignacio Correa y Villa Garibaldi. El agua que circula, cuando no se viven periodos extensos de sequía, tiene la particularidad de no estar contaminada, uno de los pocos arroyos que quedan en el Partido de La Plata con estas características. Por este motivo, les vecines de la zona se organizaron para cuidarlo y protegerlo de la contaminación y, sobre todo, de la especulación inmobiliaria que ya loteó y vendió terrenos y que pretende seguir avanzando. 

El problema con las inmobiliarias

A pesar de que Argentina aún no cuenta con una ley que proteja los humedales, la zona del arroyo se declaró paisaje protegido por la Ley Provincial 12.247 que establece que, para toda obra o actividad pública o privada que produzca o sea susceptible de producir efectos negativos al ambiente, se debe contar con un permiso y un estudio de impacto ambiental, teniéndose en consideración con carácter restrictivo a los loteos en estas áreas. 

“El arroyo se consideró paisaje protegido porque era el menos contaminado  y menos industrializado del área metropolitana que, además conservaba sus ecosistemas en estado natural porque, no tenía obras hidráulicas, no estaba canalizado, ni entubado, ni profundizado, ni encausado; estas características se mantienen hasta el día de hoy, por supuesto que más comprometidas algunas cosas porque en este momento la urbanización está cerca de su cauce”, explicó Elena,  integrante de Habitantes del Arroyo El Pescado a Revista Colibrí, y agregó que también al último tiempo se sumaron los agroquímicos como factor de alerta, ya que su cauce circula por el cordón frutihortícola de la ciudad, donde se empezó a cultivar con estos contaminantes. 

Vecinos y vecinas de la zona se aunaron en un reclamo para frenar el avance urbano en la zona de Villa Garibaldi, conocida localmente como Parque Sicardi. “La urbanización ha crecido mucho en estos barrios muy cerca del cauce del Arroyo, incluso ya sobre lo que se llama humedal o llanura de inundación”, advirtió. 

La llanura de inundación o el humedal del Arroyo es muy irregular a lo largo de todo su curso, siendo muy extensa en la zona de Villa Garibaldi. Una de las problemáticas de las que se aprovechan las empresas que buscan lotear la zona es que los límites del humedal no están fijados por lo que se conoce como el Inventario Nacional de Humedales y tampoco está definida la línea de ribera, que se fija con el promedio de las máximas crecidas en los últimos cinco años. Estas líneas marcarían un límite claro para determinar las zonas a proteger: “La situación hoy en día es que ni la Ley de Paisaje Protegido se cumple ni tenemos Ley de Humedales que pueda fijar los límites del humedal y de esa manera protegerlo”.

El Municipio de La Plata, que por el Código de Ordenamiento Urbano tiene al Arroyo El Pescado como área de valor patrimonial, delimitó en una nueva ordenanza (Ordenanza 12.079) una zona dentro de la cuenca del Arroyo El Pescado, que le llamó área protegida. Establece que en esa zona se prohíben las construcciones y toda intervención que allí se desarrolle solamente podrá hacerse con autorización del Concejo Deliberante, por otro lado, fija el polígono delimitado por las calles 7 a 22 y de 659 a 670, área con consolidación de viviendas, como un espacio de riesgo de inundación donde impone medidas particulares para la construcción, que tienen que ser autorizadas por las Secretarías de Obras y Servicios Públicos y Planeamiento Urbano.

“Las construcciones en los últimos años han seguido avanzando. Llegan a la calle 673 donde uno se para y ve a escasos metros el cauce del arroyo, la zona en épocas de lluvia se inunda. A esto se suma que cuando los loteos y la urbanización avanzan cerca del cauce, la biodiversidad asociada al humedal desaparece”, denunció Elena. 

“Las urbanizaciones sobre el humedal destruyen el humedal porque las casas que están ahí se elevan, el terreno se rellena, se compacta y de esa manera no existe más esa zona posible de inundación y no cumple más la función del humedal como es la retención del agua y la descarga a los acuíferos”, profundizó. 

Defender la ribera con el cuerpo

Durante enero del 2023 el municipio autorizó una nueva apertura de calles por sobre la zona protegida. Gracias a la rápida acción de les vecines, aquella apertura se pudo frenar, ya que se hicieron presentes en el lugar y lograron sacar las máquinas. Además presentaron junto a Luis Arias, una medida cautelar para frenar el avance y el pasado 31 de marzo se ordenó al Municipio suspender toda actividad vinculada a la construcción en esa zona. 

“Nos conformamos como autoconvocados cuando el 16 de enero nos enteramos que estaban haciendo una apertura de calles avalada por el mismo Municipio en 19 y 670, nos agrupamos en el lugar y logramos con nuestros cuerpos frenar esas máquinas”, explicó Elena . 

La medida adoptada se extenderá hasta tanto se dicte sentencia en las presentes actuaciones o se acompañe estudio de impacto ambiental con garantía de la participación ciudadana que permita revisar la medida adoptada.

El agua siempre vuelve a su cauce

«Cuando uno ve las noticias que hablan del cambio climático, de la lucha por el territorio, siempre lo siente ajeno. De repente ir al arroyo y ver todo lo que está pasando te hace dar un click, porque son cosas importantes que pueden dejar de estar, como un humedal», sentencia Luo. 

Luo junto a un amigo. Un paseo por El Pescado 2022

Recuerda un refrán que afirma “el agua siempre vuelve a su cauce” que suele utilizarse en sentidos figurativos, pero en su literalidad encierra un poco de verdad y resuena particularmente en la ciudad de La Plata por su fatídico historial de inundaciones, donde las construcciones ilegales, la apropiación de territorios y el relleno de humedales se llevan parte de la culpa. 

Conocé más historias, te recomendamos Territorios y Resistencias
No te pierdas de leer «Resistencias Migrantes» , una investigación colaborativa.
También te puede interesar:
¿Qué riesgos tiene la explotación de petróleo en el Mar Argentino?, ¿ya está sucediendo?
SE PARTE DE NUESTRA RED, CLICK AQUI
No Comments

Post A Comment