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La ley de leyes es de ajuste | Revista Colibri
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La ley de leyes es de ajuste

Por Nicole Martin

Peores salarios, más impuesto a las ganancias, recortes en educación, salud, cultura y vivienda y un aumento en el ítem del pago de intereses de deuda. «Nunca se hizo un ajuste de esta magnitud sin que caiga el gobierno», destacó el Ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, sobre la llamada «Ley de Leyes», en el marco del 50° aniversario de la Comisión Nacional de Valores. Orgulloso de su partido y de cara a las elecciones, sentenció: «Cambiemos va a ganar».

El presupuesto 2019 aprobado en el Senado por 45 votos contra 24 no sólo avala la caída económica que sufrió el  país en 2018, sino que planifica una recesión para el año que viene que, por supuesto, golpeará a los trabajadores de todos los sectores, exceptuando al de la exportación y al área destinada al pago de la deuda. La economista Candelaria Botto, destacó en diálogo con Revista Colibrí el golpe a las mujeres en el contexto de ajuste, dentro de la pérdida de poder adquisitivo que sufrirá el conjunto de trabajadores en general.

 

Fotografía: Marina Diksaitis

 

Con una llegada a Diputados marcada por la represión, en el Congreso la mayoría ganó la media sanción por poco, con voto afirmativo a la propuesta del oficialismo, mientras que en las calles se recordó a la jornada de la reforma previsional, en diciembre del año pasado. «Querían tomar el Congreso, pero la policía de la Ciudad actuó rápido», aseguró la Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. Los diciembres tienen un sabor amargo en Argentina. Los presupuestos en tiempos de crisis, también.

Aunque hay diferentes posturas entre los economistas, de izquierda a derecha coinciden en un punto: para alcanzar la preciada “convergencia económica”, la coyuntura económica deberá lidiar con peores salarios y más desempleo. Este término es el reemplazo del concepto de «déficit primario cero», es decir, equilibrio primario, porque lleva el estigma de la mala prensa. La estratregia, promesa al FMI, implica que todos los ingresos del Estado igualen a todos sus gastos, exceptuando a los de servicio de la deuda pública. El fantasma del “déficit cero” retrotrae a la Ley sancionada en el gobierno de De la Rúa a finales de 2001. En aquel momento, el FMI felicitó la decisión y afirmó a los medios que “ayudaría en gran modo a estabilizar la situación macroeconómica del país”.

A excepción de los sectores vinculados directamente a la exportación, el efecto de la búsqueda del objetivo complicará la recuperación de salarios después de un 2018 donde la moneda sufrió una fuerte devaluación. “La caída de la actividad económica se va a profundizar con el ajuste sobre la obra pública y quita de subsidios, menor consumo y la continuidad de altas tasas de interés”, declaró a Revista Colibrí el economista Demián García Orfanó, analista en recursos tributarios en el Ministerio de Economía. Martín Kalos, economista y docente, agregó que el ajuste en el gasto público tendrá un impacto principalmente en la construcción, lo que aumentará el desempleo.

 

Fotografía: Marina Diksaitis

Precarización se escribe en femenino

Si se cruza la variable de género, los sueldos de las trabajadoras serán los más afectados. “Las mujeres tienen ingresos medios un 28% más bajos que los hombres, y mayores tasas de desocupación y precarización”, afirmó Candelaria Botto, economista especialista en género. La inactividad de las mujeres creció en los últimos dos años según el INDEC, pero gran parte del porcentaje pasó a empleos precarizados.

Las mujeres tienen un 28% menos de ingresos medios que los hombres, mayores tasas de desocupación y de precarización laboral. Evidenciado en que el 70% del grupo poblacional con menores ingresos son mujeres. Entonces, afirma la feminista y docente, parte del medio Economía Femini(s)ta: “Todas las medidas de ajuste, recesivas, impactan más al sector femenino. Incluso en este escenario que es muy duro para todes les trabajadores”.

La coyuntura recesiva, con una caída del PBI de al menos dos puntos y medio, sumado a la inflación del 45%, continua acrecentando una desigualdad social que se respira en todos los ámbitos públicos. Y en el 2019,  la caída económica se profundizaría. Según la «ley de leyes», presentada por el Poder Ejecutivo ante el Congreso, la economía caería 2,4% en 2018 y 0,5% en 2019.

 

Fotografía: Marina Diksaitis
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