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Para que la lactancia sea un derecho | Revista Colibri
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Para que la lactancia sea un derecho

Por Agustina Verdi

Las puericultoras son las personas que acompañan la lactancia a quienes amamantan y a sus familias, facilitando información y herramientas desde la gestación, durante el puerperio y en los primeros años de crianza. Promueven la salud en la niñez y los beneficios de la lactancia en el aspecto humano familiar, individual, social, económico, ambiental, entre otros.

Al ser una tarea de cuidado, queda mayoritariamente en manos de mujeres que llevan adelante este rol en instituciones de salud, áreas de maternidad, neonatología, consultorios externos, pediátricos, jardines maternales y de forma particular. Actualmente luchan por ser reconocidas, porque forman parte de los equipos interdisciplinarios de salud, pero no son registradas como profesionales

Como todo trabajo de cuidado, está infravalorado y se pretende que uno lo haga por amor”, explica Verónica Soledad Crosatto, puericultora y doula, a Revista Colibrí

Ella forma parte de Unión de Puericultoras Argentinas (UPA), una asociación civil sin fines de lucro que desde 2016 se reúne por el reconocimiento oficial de la profesión. Cuenta que son convocadas y requeridas en los equipos médicos del sector privado pero, al no ser reconocidas como profesionales, son contratadas como monotributistas o tienen cargos administrativos, lo que las invisibiliza y afecta económicamente.

El sector público solamente tiene en cuenta la importancia de su tarea cuando alguna escuela de puericultura quiere llevar adelante un voluntariado para que sus alumnas practiquen. “Esos voluntarios funcionan barbaramente y a los Hospitales les encanta que estemos pero no nos pagan, entonces no podemos acceder a cargos y no tenemos derechos laborales”, afirma la puericultora.

Desde UPA impulsan dos proyectos de Ley que esperan este año de elecciones, con tanto movimiento en el Congreso, puedan tratarse. El D/1567/22-23 fue presentado por la Diputada Mariana Larroque en la Provincia de Buenos Aires, que busca regular el ejercicio de las puericultoras como trabajadoras de la salud. El otro es el Proyecto de Ley Expediente 1029-D-2022 presentado por la Diputada de la Nación Vanesa Siley y tiene como objeto incorporar la atención por parte de las puericultoras dentro de la prestaciones que dispone la Ley de parto respetando 25929/04.

Profesionalizar la tarea de las puericultoras, otorgarles una matrícula y un espacio definido en un equipo interdisciplinario de salud, le daría reconocimiento a las trabajadoras y también ayudaría a toda la sociedad. El sistema actual beneficia a quienes tienen altas coberturas de salud en clínicas con departamentos de puericultoras. Las incluyen principalmente para reducir gastos médicos de forma directa o indirecta ya que, gracias a su intervención, ingresan en guardia menos niñes con infecciones, mujeres con mastitis, y otras complicaciones que puede traer una mala lactancia.

En los lugares más vulnerables no hay acceso a la puericultura y es donde más deberían haber”, dice Crosatto. Que haya una profesional facilita la lactancia plena, brindando técnicas para la prendida del bebé, entre otras cosas como que no se receten fórmulas que no consideran el contexto de la familia.

“Se olvida que quizás no tienen acceso a agua potable, o no tienen acceso a esas leches que llevan a que le den leche de vaca rebajada con agua y es muy peligroso e implica no tener una buena salud”, lamenta la puericultora. Exigen universalizar el acceso y que haya puericultoras en Hospitales públicos, atención primaria, centros de salud.

En UPA las miembras se capacitan permanentemente con profesionales reconocides en el ámbito médico y brindan la posibilidad de encontrar puericultoras por zona de domicilio a familias interesadas. Además, se forman en género y diversidad, orientando a padres trans que deseen amamantar, parejas de lesbianas donde ambas desean amamantar y otras posibilidades de lactancia que contemplen y acompañen las distintas maneras de familia y el vínculo con les niñes.

Por todas estas aristas la propuesta de profesionalización de la UPA es una ampliación de derechos para la sociedad: “Si se quiere tener una verdadera política  y llegar a buenos estándares de lactancia humana y sostenimiento de la mismas, somos necesarias en un equipo médico interdisciplinario, estamos hoy, solo que no somos reconocidas formalmente, pero nuestra experiencia da cuenta de la importancia de nuestro rol en los equipos de salud”.

El 19 de mayo harán un evento para visibilizar la profesión, recibir el apoyo de toda la comunidad y exigir que salgan las dos leyes que hoy son proyecto y harían que el valor de su tarea sea reflejado en el reconocimiento oficial de la profesión.

 

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