Loader
Disputar la representatividad - Entrevista a Natalia Zappacosta | Revista Colibri
11618
post-template-default,single,single-post,postid-11618,single-format-standard,bridge-core-1.0.5,ajax_fade,page_not_loaded,,qode-title-hidden,qode_grid_1300,qode-theme-ver-18.1,qode-theme-bridge,disabled_footer_top,disabled_footer_bottom,qode_header_in_grid,wpb-js-composer js-comp-ver-6.0.2,vc_responsive

Disputar la representatividad – Entrevista a Natalia Zappacosta

Conectades, entrevistas de cuarentena

Edición #14 Natalia Zappacosta

Por Alana Rodriguez 

Natalia Zappacosta es actriz, directora y guionista. Estudió en el conservatorio nacional la carrera de “Realizadora cinematográfica” y continuó formándose en artes dramáticas. Participó como actriz en cine y teatro y finalmente se dedicó a la dramaturgia de las comedias musicales en “Delirium Romanum”, primera y segunda parte, y las obras “Vidas sin reglas” y “La Historia de mi Histeria”. En 2017 creó el taller de comedia de improvisación, uno de los talleres impulsados por la Cooperativa Arte Trans. Actualmente conduce un programa nacido durante la pandemia:  «Un buen plan«,  basado en su taller de improvisación y transmitido por el canal de YouTube de Cooperativa Arte-Trans, todos los viernes a la noche.

En la #14 edición de Conectades, Natalia conversó con Alana Rodriguez, fotógrafa de Revista Colibrí, con quien forjó una íntima amistad a través de un trabajo fotográfico: «Un día llegué a trabajar a la universidad de Avellaneda donde dábamos talleres y apareció Alana diciendo que nos va iba a sacar fotos para un trabajo en la facu. A mí la idea no me gustó para nada porque nuca fui muy amiga de las cámaras pero de repente, me dí cuenta de que todas se habían lookeado y habían posado menos yo. Alana me sacaba fotos de costado y le terminé diciendo que sí, que posaba para sus fotos. Terminamos haciendo un trabajo fotográfico juntas como de 6 meses».

– Alana: Yo estoy muy feliz, lo que más me gustó de hacer ese trabajo es la amistad y el vínculo que generamos. Eso es lo que más valor tiene. Para las dos fue un crecimiento enorme.

– Natalia: Yo aprendí a perderle miedo a la cámara, esto tuvo que ver también con como me sentí con vos, que me sentía libre y conseguí perder la vergüenza delante tuyo. Creo que este trabajo no lo habría podido hacer con otra persona. Me pareció muy vital entender que en realidad la sinergia que se estaba creando entre nosotras dos fue lo que generó que yo le perdiera el miedo a las cámaras, que yo me animara a mostrarme, fue muy importante. Realmente muy importante lo que generó nuestra relación a través de ese trabajo. Yo tenía muchísimo miedo a las cámaras, tras la transición yo había decidido dejar de actuar, dejar de mostrarme públicamente, llevar una vida mas reservada y que se yo, por eso estaba dirigiendo.

Fotografía por Alana Rodriguez

Alana: Recuerdo que nosotras nos habíamos puesto a conversar y vos me comentaste este tema que vos tenias con sacarte fotos  y yo te dije que, en realidad, está re bueno trabajar eso porque la relación que hay con cómo te ves en una foto está completamente ligada a cómo te ves vos misma más allá de la foto. Me acuerdo que después de eso me quedé con ganas de conocerte más a vos y te propuse hacer el trabajo para ARGRA, que teníamos que hacer un trabajo con un personaje que nos interese y yo quise hacerlo con vos. Básicamente, te propuse pasar tiempo juntas y hacer fotos.

Natalia: Y fue eso, ir juntas al río, comer juntas, que me acompañes a la radio, viniste a una fiesta conmigo, me acuerdo. Yo te llamaba «mi paparazzi privada» y vos  te aparecías con la cámara. Eras mi amiga y venías a  acompañarme y además traías la cámara. No eran situaciones que generaban tensión, sino desde otro lugar y la verdad que eso a mi me hizo generar más confianza.

Alana:  Y luego el trabajo de post-producción que también trabajamos juntas. El trabajo tiene mucho de lo íntimo y lo conceptual que tiene que ver con las conversaciones que hemos tenido y que fueron una base muy importante.

Natalia:  Me acuerdo un día que me puse unos pescadores. porque mi transición la hice muy lenta, muy despacio, muy tranquila, entonces, por ejemplo nunca había usado pantalones cortos, nunca desde que hice mi transición en 2013 hasta casi 2018 que hicimos las fotos. En esa primavera, fue la primera vez que decidí usar pantalones cortos. Entonces mis piernas literalmente sentían el sol por primera vez después de 6 años. Te lo conté y me acuerdo que apareció como pie de nota cuando lo publicamos. Me pareció super groso, porque ahi esta la relación construida. En lugar de sentir algo invasivo, me sentía acompañada. Entonces la divulgación de esas fotos era algo natural porque era algo que había compartido con vos.

Fotografía por Alana Rodriguez

– Me gustaría que nos compartas tu opinión sobre un tema que estuvimos charlando sobre representación de las personas trans y de la comunidad LGBT dentro del cine y las series… vos que pensas sobre esto?

Yo considero que la representación está incompleta, no hay una representación real de lo que significa mostrar una persona trans en cine o TV.  Todavía hoy en día los personajes trans siguen siendo marginales o siguen siendo prostitutas o simplemente desocupadas y etc. Bueno, habemus personas trans que tenemos laburo, habemus personas trans que no tenemos ese conflicto, que tenemos un montón de otros conflictos pero que no tenemos el conflicto de identidad, que ya el conflicto de identidad lo superamos, ya está, ya sabemos quiénes somos, no tenemos que pasar por ningún proceso de identificación y no por eso los conflictos serán menos importantes.

Pero da la casualidad que lo único que se muestra en una ficción es eso. El otro día estaba hablando en una charla de dramaturgas feministas y transfeministas y justamente se acababa de estrenar la película «Bajo mi piel morena» donde trabajan tres amigas, dos de ellas son socias en la cooperativa. Y en la película una de ellas era maestra, la otra laburaba en una fábrica medio de segunda y la otra prostituta, está todo bien yo conozco chicas que son prostitutas, pero mis amigas, mi círculo de amigas no tienen esos conflictos, tienen laburo, nos rompemos el lomo, no digo que no mostremos que las mujeres trans se siguen prostituyendo, eso está clarísimo, más del 80% de las mujeres trans hoy por hoy están laburando en la calle, eso no se duda, ahora lo que yo digo es: me voy a sentir identificada con lo que se ve en pantalla o con lo que se lee en literatura sobre personas trans el día que aparezca una neurocirujana trava.

Tengo muchisimas amigas profesionales, con una carrera y demás y no se las muestra, eso no se muestra. Y otra cosa que sucede también es la cuestión de lo políticamente correcto, en las ficciones ahora, como hay que ser políticamente correcto, no se animan a putearnos como nos putean de verdad en la calle. Entonces da la sensación de que cuando alguien te maltrata en la calle es «¡Ay! mirá esa mujer trans, ¡qué maldita!» y  no, te gritan de todo, te gritan «puto», te gritan de todo en la calle, te lo siguen diciendo, te siguen maltratando, eso no cambió. El hecho de que dos amigos se junten y que uno le diga al otro: «¿Estás saliendo con una chica trans?». No, no lo dicen así, no seamos hipócritas, dicen «¡¿Te estás comiendo a un trava?!» en masculino, y en forma despectiva.

Entonces, me parece que lo importante es que cuando nos representan nos representen de la mejor manera posible y que la gente vea, porque la gente piensa que lo que pasa en las ficciones es la realidad, entonces mostremosles la realidad, de esa manera más personas trans nos vamos a sentir identificadas.

Natalia Zappacosta descansando en el rio de Vicente Lopez. Fotografía por Alana Rodriguez

– Sí, es como que las tramas dentro del cine siempre van de los mismo cuando se trata de representar a las identidades trans, ¿no? que tiene que ver con la transición, con la situación de prostitución, y no se ven otras historias, por lo menos yo no he visto.  ¿Hay alguna pelí o serie donde te hayas sentido representada?

-No, todavia no, todavia no.

– ¿La cultura es un reflejo de lo que pasa en la sociedad o la cultura forma lo que pasa en la sociedad? ¿o son ambas?

Claramente son las dos, el problema en realidad es que con tanto movimiento feminista, con tanta movilización que hubo, tanto que rompimos las pelotas, y seguiremos haciéndolo todo lo necesario, entonces con tanto que sucedió, nos tienen miedo, tienen miedo hasta de contar nuestras historias. Igualmente, aún no hubo una sola ficción escrita por personas trans sobre personas trans, todas las ficciones que hay las escribieron hombres cis o mujeres cis. A lo sumo, con suerte, hay algunas historias que están contadas con alguna persona trans como asesora de los guionistas, pero la historias está escrita por personas cis. Me parece que falta eso, guionistas que digan che esto no lo podemos hacer nosotres, no podemos escribir una historia sobre la vida de alguien que no entendemos.

– Y, ¿qué pensás sobre personas cis interpretando a personajes trans?

Yo estoy totalmente en contra de que una persona cis interprete un papel trans, eso es absolutamente así. Pero el otro día vi una serie chilena muy buena, de Lucia Puenzo, que se llama «La Jauria», y una de las protagonistas es la actriz de «Una mujer fantastica», la película chilena. Es una actriz trans y es la protagonista de esta serie donde esta haciendo un personaje cis, entonces dije «¿qué onda?». Este modo whitewashing, que es como se le dice cuando un personaje blanco hace de un personaje negro o de un personaje oriental, hoy por hoy es un actor cis haciendo de un personaje trans.

Lo que digo es, ¿va para los dos lados? ¿cómo tendría que ser? ¿El personaje de esa mujer cis lo tendria que interpretar otra mujer cis? ¿o estamos todes contentes con el hecho de que le dieron laburo a una artista trans para un personaje cualquiera? Porque el personaje podria haber sigo escrito como trans y no habría habido problema. ¿Cómo funciona? ¿Hay hipocresía? ¿Funciona igual para un lado que para el otro? ¿Cómo nos manejamos?

A mí me parece interesante que piensen en mujeres trans desde el punto de vista de que nos tengan confianza y nos digan «sos una mujer biológica, ahora, anda para delante con esto, sos una mujer cis, está buenísimo» pero desde el otro lado, ¿qué se siente?

– Yo creo que está copado en el sentido de que le están dando a un persona trans un papel en donde la trama no va con que ser  trans, que es algo que pasa un montón, y me parece copado desde ese lado. Igual pienso esto a partir de  todas las veces que hablé con vos y que me haces dar cuenta de esto, que siempre en las pelis la trama va por el mismo lugar con las personas trans.

Lo loco es que este personaje tiene las mejores lineas de diálogo feminista, una es: «Acá no es lobos contra corderos, acá es lobos contra leonas». Esa frase me voló la cabeza y dije «¡Sí, carajo!» pero aún así como que están estas cuestiones de discriminación…

Natalia Zappacosta posando para la cámara. Fotografía por Alana Rodriguez

– A mi me parece muy terrible lo que pasa acá en Argentina con la farándula y las personas trans, por ejemplo me acuerdo de  Zulma Lobato que se hizo conocida en el programa de Anabella con la intención de burla y luego la abandonaron completamente.

También estamos hablando de una persona  que tenía edad avanzada, que había sido completamente abandonada por toda la familia. Los medios la sobre-inflaron, le crearon un ego que no tenía y eso la condujo a perder los estribos. Le pagaron operaciones, le pusieron dos globos aerostáticos gigantes. Esos puntitos de rating que le dieron jugaron con ella, le dieron un montón de manija, le generaron un montón de cosas y luego la abandonaron completamente. Lamentablemente ella nunca tuvo a nadie al lado que le dijera: «Loca, están jugando con vos».

– Tal cual, los medios tuvieron la intención de construir esa imagen de persona trans.

En esa época, otra de las representaciones era Florencia De La V y, perdonen chicas si están mirando y piensan que es la representación magnifica de lo que es ser trans en los meedios, pero no lo es. Ella hizo su carrera en base a la exposición machista, al juego machista que estaba planteado en ese momento y nunca militó ni siquiera cinco minutos de su vida. Lo hizo solamente cuando le dieron el documento que posó para la foto, lloró en cámara dos veces y después nunca más se preocupó por la comunidad trans.

Ahora está empezando a militar me dijeron y perdón pero no la voy a aceptar yo que desde el momento cero entendí que si no militábamos no podíamos conseguir absolutamente nada.  Ella tampoco hizo nada por Zulma Lobato. Ese es el problema, todo fue una gran joda, fue show, como el programa de Tinelli, buscar el escándalo y no importarle cuál es la cabeza que va a rodar adelante. Bueno, tenemos una cabeza que va a rodar y es de una persona que tiene sentimientos, que no tiene un entorno que la está ayudando. Tenemos que buscar generar ese entorno, no dejar sola a una persona trans que esta siendo vulnerada. No sé dónde andará ella, porque nunca más se habló de ella.

El lunes 27 de julio Zulma fue asaltada y golpeada brutalmente en la vía publica como otro claro hecho de transodio. Fue hozpitalizada por las graves heridas que le produjeron. Actualmente la organización libres.mariposas recolecta donaciones para Zulma ya que su situación económica es vulnerable. 

 

| Conocé más sobre la Cooperativa de Arte Trans
También te puede interesar «Relatos Trans en el encierro» 
Colaborá con Revista Colibrí aquí  

No Comments

Post A Comment