Lucía Prieto – Foto de la semana
Por Alma González
En esta edición de la #fotodelasemana, presentamos el trabajo de la fotógrafa autodidacta e independiente Lucia Prieto. Su mirada se posiciona principalmente en las calles, habitándolas para crear imágenes que transmiten movimiento, gritos de lucha y resaltan la fuerza de un momento histórico, inundado por la marea feminista.
– ENM Mar del Plata 2015 –
Conversamos con Lucía sobre su obra, la cual es publicada en varias revistas, medios de comunicación y libros nacionales e internacionales:
-¿Cómo comenzaste a interesarte en la fotografía documental?
Cuando descubrí la fotografía, había sido mamá hacia muy poco tiempo. Ante la imposibilidad de tener tiempo para mí y las complicaciones económicas, mi herramienta de formación constaba en pasar horas y horas tocando los botones de una cámara póquet y mirando fotos y fotos y más fotos. Aprendí observando a otres que me inspiraban e interpelaban. En ese momento, las imágenes que más impactaban eran todas aquellas en donde la realidad estaba plasmada con toda su complejidad, donde la subjetividad de la mirada tenía la carga intencional de transmitir emociones, de hacer reflexionar y de proponer un discurso alternativo, al hegemónico. Varios años después cuando pude comprar mi primer cámara réflex, sabía que la calle -entendida como espacio de lucha colectiva- era el lugar desde donde quería hablar sin inocencia, con la intención clara de transmitir un mensaje sensible a las convicciones políticas que me convocan a cada espacio.
– Ni una menos 2017 –
–¿De qué manera abordas la cobertura en las marchas? ¿Preferís dirigir la composición o improvisar con lo que va sucediendo?
Mi manera de trabajar fue variando con los años en función de las preguntas y cuestionamientos personales que me fueron sucediendo al fotografiar: ¿por qué lo hago? ¿para quién lo hago? ¿cómo muestro lo que muestro y a quien/quienes y desde qué lugar estoy observando? Cada tanto necesito parar y pensar, acomodarme, entender y entenderme, cuestionarme. No soy la misma de hace 10 años, ni la misma que era antes de que el feminismo aparezca en mi vida, hace ya un tiempo largo que mi mirada está completamente empapada de perspectiva feminista. Creo que es importante detenerse a reformular y no ser una especie de máquina que repite lo que más o menos funciona en términos estéticos y que el contenido o la forma en la que éste se exprese quede relegada a un segundo plano. Actualmente, entonces, suelo pensar con anticipación qué es lo que voy a ir a buscar, que sujetos van a ser les protagonistas.
– 8M Paro Internacional de Mujeres 2018 –
En la actualidad tenemos una sobrecarga de imágenes en las redes, un bombardeo visual constante que nos sofoca la mirada, por lo que intento encontrar una narrativa que pueda ser paralela u original como para que despierte el interés necesario para que alguien se detenga a verla. Después es llegar al lugar y ver qué pasa con eso, disfruto del desafío de lo imprevisible. Trato de llegar temprano, tener tiempo de caminar sin hacer fotos y habitar el espacio para que cuando se dé la masividad yo ya sea parte también. Siento así que cuando lo logro, el resultado no son fotos distantes ni ajenas. Camino mucho, mucho. En relación a la composición, depende. No tengo reglas fijas. Los retratos suelo proponerlos, pero también muchas situaciones capturadas, son lo que está sucediendo y las tomo sin intervención.
–¿Qué sensaciones y experiencias te atraviesan al poner el cuerpo tanto en la lucha como en registrar el momento?
Una vez hablando con un amigo fotógrafo recuerdo que le dije que me cuesta mucho o que no elijo fotografiar aquello en lo que no creo. Eso no significa que necesariamente tenga que estar de acuerdo. Si creo en lo que voy a fotografiar, me convoca, me hace tomar posicionamiento y desde ahí puedo entonces hacer fotos. Si no me pasa nada, si no me conmueve, erotiza, repele o no despierta alguna emoción en mí, posiblemente el resultado sea una foto que como mínimo aburra un montón. Fotografío con y desde la emoción. Si la lucha me convoca, todo es mucho más poderoso y visceral.
-ENM Trelew 2018: Marcha contra los travesticidios –
-Talleres ENM trelew, cobertura conjunta con Luciana Leiras-
-¿Cómo te preparas para el encuentro Plurinacional de mujeres, lesbianas, trans, travestis y no binaries?
Espero todos los años este fin de semana. Siento que éste particularmente será un Encuentro distinto. La elección de la sede en La Plata en combinación con la masificación de los feminismos en los últimos años da como resultado esperable una convocatoria multitudinaria. Elección que, para nada casual, ubica el evento en un territorio clave en la disputa del año electoral, a una semana de los comicios. A su vez, cubrir el encuentro siempre se nos plantea como un desafío enorme en tanto la importancia que el evento tiene para la construcción del movimiento feminista, y por la amplitud y multiplicidad de debates que se expresan dentro suyo, y que abonan al crecimiento y la transformación permanente del mismo. Este año, me preparó siendo parte de un proyecto de cobertura interdisciplinaria y colectiva. Nos preparamos justamente dándonos un espacio de debate al respecto del contexto en el que se va a desarrollar. Coincidimos en la necesidad de trabajar hermanadamente, y nutriéndonos de la diversidad de miradas, para que esa cobertura pueda abarcar tanto la importancia de ésta expresión de los feminismos como sujeto político, pero también en la necesidad de que la cobertura se posicione políticamente respecto a las discusiones que se dan hacia el interior de los feminismos, como por ejemplo la denominación del Encuentro como plurinacional, de mujeres, lesbianas, travestis, trans y no binaries.
– ENM Chaco 2017-
– 8M 2019-
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